1. Fortalece la autoestima
Para un niño de 2 años, iniciarse en la bici es un proceso de aprendizaje que implica esfuerzo, práctica, perseverancia y superación. El niño pequeño aprende por etapas: primero la bici sin pedales, luego la bici con pedales, que en algunos casos, primero lleva rueditas. Hasta que son capaces de pedalear sin ayuda en una bici de 2 ruedas alrededor de los 4 años. El niño va superando etapas como resultado de su esfuerzo, y son estos pequeños éxitos que va acumulando a lo largo de su primera infancia lo que marcará su autoestima de mayor.
2. Aumenta la autonomía
Al iniciarse en la bici desde pequeños, los niños tienen la oportunidad de moverse por la ciudad sin ir en el carrito como un bebé. Llevar en carrito a un niño que puede caminar solo es reprimirle su potencial. Hay que evitar lo más posible llevarlos así, como si fuesen inválidos. En cambio el niño que va en bici puede movilizarse por sí mismo, controlar su velocidad o decidir cuándo detenerse, cuándo andar, a dónde ir. Es decir tiene autonomía, es libre. En la bici puede ir tan rápido como camina o corre un adulto, con lo cual, es una excelente opción para hacer su rutina diaria, por ejemplo, de ir y venir de la guarde o del cole.
3. Inculca hábitos saludables
Tales como practicar actividad física, estar en forma y alimentarse bien. Los niños aprenden a vivir una vida activa y llena de energía.
4. Inculca conciencia ecológica
Se les enseña a los niños desde pequeños a movilizarse en opciones distintas al coche.
5. Une a los niños con sus padres
Andar en bici brinda la oportunidad a los niños de socializar con sus padres o amigos en un ambiente de confianza y diversión. Fomenta la conversación y el apoyo mutuo.
6. Ayuda a desarrollar su sentido de responsabilidad
Como dice Spiderman, el súper héroe favorito de mi hijo, “con mayor poder viene una mayor responsabilidad”. Al niño ser más autónomo y tener más poder, se hace perentorio enseñarle a ser responsable. El niño debe entender que debe tener mucho cuidado y ser muy precavido, para ello podemos enseñarle las normas de seguridad básicas y la importancia de seguir las instrucciones de los adultos para evitar malas consecuencias:
Entender que el paseo es con compañía así que siempre debe estar pendiente de donde están sus padres o cuidadores y seguirlos.
Conducir muy cerca de su padre/cuidador al que siempre debe esperar.
Ir hacia la dirección indicada por su padre/cuidador.
Detenerse antes de cada cruce de la calle.
Pedir permiso si quiere ir hacia alguna dirección diferente.
7. Los hace más felices
No solo porque es un juego divertido, sino porque les propicia espacios en silencio con sus pensamientos para meditar e incubar ideas. Estos tiempos generan mucho bienestar emocional y satisfacción personal
8. Excelente oportunidad para desarrollar su educación vial
Al conducir en su bici el niño es como un motorista. Debe saber que hay que detenerse cuando el semáforo está en rojo (en su caso el de peatones). Solo cruzar la calle cuando los coches se han detenido y el semáforo de peatones está en verde. Solo cruzar por la zebra. Tener cuidado de no atropellar a la gente, ni cerrar el paso, conducir por el lado alejado de la carretera, ceder el paso a las personas, a otras bicis, etc. Que desarrolle desde su temprana experiencia su habilidad de hacer lo mejor posible para facilitar la circulación vial.
9. Aumenta su resistencia hasta poder andar al ritmo de los mayores
Un niño pequeño desde 2 años que usa su bici como rutina diaria fortalece más rápidamente sus músculos y mejora su capacidad de resistencia a tal punto de poder aguantar largas caminatas con los adultos. Ya no necesita la excusa de que “va en carrito porque se cansa o porque va muy lento”. O “va en bici solo unos minutos y después se cansa, luego toca cogerlo o llevarlo en carrito”. Pues esto se soluciona dejando al niño entrenar en su bici todos los días, y poco a poco ir aumentando la distancia o la velocidad, con el tiempo ya no hay excusas.
10. Potencia el desarrollo de la psicomotricidad, de los sentidos y reflejos.
Los niños aprenden del movimiento y el juego libre. El dominio de la bici ayuda al niño en pleno desarrollo a potenciar su coordinación, equilibrio y dominio del cuerpo porque para realizar cada movimiento y desarrollar equilibrio el cerebro del niño tiene que hacer múltiples cálculos matemáticos en segundos. La bici mejora las capacidades motrices, favorece su agilidad y velocidad. Con este ejercicio los niños entrenan su mente, sentidos y cuerpo. Los reflejos se agudizan mucho para reaccionar inmediatamente ante un estímulo de alerta, por ejemplo para frenar de repente para no chocar y girar el volante de un lado para el otro para esquivar obstáculos.
11. Los aleja de la tecnología
El exceso de tecnología mata la creatividad de los niños y los convierte en zombis sedentarios. Por ello combatir este enemigo silencioso con paseos y rutinas diarias en bici es una excelente estrategia de ocupar la mente y el cuerpo en una actividad enriquecedora al aire libre. Hacer deporte en bici libera endorfinas que regulan los nervios y el estrés, este ejercicio es una vía de escape a las tensiones y la sobre estimulación tecnológica y su puerta de entrada a otros mundos.
TRUCO PARA ENSEÑAR A MONTAR EN BICI A UN NIÑO DE 2 AÑOS
Para iniciar el aprendizaje, lo mejor es usar una bici de 2 ruedas sin pedales, en lugar de usar la típica bici con pedales y rueditas laterales. Porque con la bici sin pedales el niño puede aprender por etapas. Primero, en esta bici aprende a desarrollar el equilibrio a su propio ritmo y, sólo cuando ya tiene un excelente equilibrio, porque puede ir bastante rápido y planea indefinidamente alzando sus piernitas, se considera que está preparado para la segunda etapa. La segunda etapa consiste en usar la bici de 2 ruedas con pedales sin rueditas laterales y aprender a coordinar el movimiento cíclico de pedalear mientras mantiene el equilibrio. Es más fácil primero desarrollar el equilibrio y después desarrollar la coordinación que aprender ambas habilidades al tiempo.Si después de leer todas estas razones de peso, os quedaron con ganas de comprarle una bici a vuestros hijos, os recomiendo la Bicicleta de Aprendizaje Número 1, Legler que vendemos en nuestra tienda online. Es la misma bici que conduce mi hijo en la foto publicada como cabecera de este artículo. Es una bici de madera sin pedales monísima y original que brinda mucha estabilidad a los niños pequeños que se inician en este aprendizake. El asiento es regulable y las ruedas son de goma, no se pinchan. Mi hijo la adora, va y viene de la guarde todos los días en bici y también recorre todo Madrid en ella paseando o acompañándome a hacer recados.
Excelente artículo, muy buenos consejos. Gracias